top of page

Cinta de correr

Cómo se hace:
Ponte sobre la cinta de correr con ambos pies en los laterales de la banda y ajusta la configuración de velocidad e inclinación antes de empezar. Una vez lista, comienza caminando o corriendo a un ritmo cómodo. Mantén una postura erguida, con los brazos relajados y moviéndose naturalmente al compás de tu paso. Aumenta gradualmente la velocidad o inclinación según tus objetivos de entrenamiento.


Técnica:

  1. Ponte de pie en la cinta asegurándote de que esté detenida o a baja velocidad antes de empezar.

  2. Sujeta las barras laterales para estabilizarte mientras inicias la marcha, pero suéltalas tan pronto como te sientas seguro.

  3. Mantén una postura erguida con la cabeza alineada con la columna, los hombros relajados y los brazos balanceándose de forma natural.

  4. Aterriza suavemente con cada paso, apoyando primero el talón y luego el resto del pie.

  5. Ajusta la velocidad o inclinación según tus necesidades, manteniendo un ritmo constante y controlado.

Tips:

  • Usa ropa y calzado adecuados para evitar molestias o lesiones.

  • Comienza con un calentamiento de 3-5 minutos a baja intensidad para preparar tu cuerpo.

  • Mantén una velocidad moderada si tu objetivo es el acondicionamiento general, o alterna intervalos de alta y baja intensidad para entrenamientos cardiovasculares más avanzados.

  • Evita mirar constantemente hacia abajo o sujetarte de las barras mientras corres.

  • Al finalizar, reduce gradualmente la velocidad para evitar mareos.

Para qué funciona:
La cinta de correr es una herramienta versátil para mejorar el acondicionamiento cardiovascular, quemar calorías, y fortalecer piernas y glúteos. También es útil para sesiones de rehabilitación, caminatas ligeras, o entrenamientos de alta intensidad dependiendo de la velocidad y la inclinación seleccionadas.


Músculos trabajados:

  • Cuádriceps.

  • Isquiotibiales.

  • Glúteos mayores.

  • Pantorrillas.

  • Core (como estabilizador).

bottom of page